
Paraguay advierte que detendrá a Stroessner y su hijo si ingresan al país
EFE
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La ministra de Relaciones Exteriores de Paraguay, Leila Rachid, aseguró hoy que se procederá a la detención del ex dictador Alfredo Stroessner y de su hijo Gustavo Stroessner Mora si abandonan su asilo de Brasil y regresan al país.
El diario local 'Abc Color' afirmó hoy que el regreso de ambos estaría motivado por la enfermedad de la esposa del ex dictador, Ligia Mora, de 95 años, quien permanece desde hace tres días en la unidad de cuidados intensivos de un hospital asunceno.
"Si es que llegaran a venir a la República del Paraguay, vamos a proceder en consecuencia, lo cual significa que se procederá junto con la justicia a lo que las leyes exigen", afirmó Rachid a los periodistas.
La ministra aclaró que el Gobierno no ha recibido planteamiento alguno para que Stroessner y el hijo que le acompaña en Brasil puedan volver al país por razones humanitarias.
Según 'Abc Color', Stroessner "estaría tratando directamente con el Ejecutivo", mientras que el abogado de su hijo, Hirán Delgado, confirmó hoy que ha recurrido a la justicia para revocar la orden de detención que pesa contra su cliente.
Añade que el ex dictador y su hijo argumentaron una "acuciante situación familiar", aunque el activista de los derechos humanos Martín Almada aseguró que el hombre que manejó Paraguay con mano dura más de 34 años no puede hacer ese tipo de invocaciones.
"Stroessner nunca ha tenido consideración de la urgencia familiar con nadie. Fue implacable con todo, tiene que pagar, rendir cuentas ante la justicia paraguaya e internacional por el Operativo Cóndor", dijo Almada, quien en 1992 descubrió los archivos secretos de los organismos de seguridad de la dictadura.
Las toneladas de documentos secretos que había en los archivos desvelaron detalles del Operativo Cóndor, un esquema de intercambio de información y de prisioneros políticos durante los regímenes militares que imperaron en los países del Cono Sur americano en la década de los años 70 y comienzos de los 80.
Stroessner, de 93 años, "fue cómplice de la desaparición de más de 30.000 argentinos, responsable de la muerte de más de 120 paraguayos en Argentina y contribuyó a los golpes de Estado en Chile y Bolivia", señaló Almada.
El anciano ex dictador afronta varios procesos por delitos de lesa humanidad, entre ellos uno por la muerte de la esposa de Almada, Celestina Pérez, mientras el activista estaba preso, y otro por la desaparición de dos hermanos después de ser detenidos.
En esos casos fue declarado "reo rebelde y contumaz a los mandatos de la ley".
Por su parte, el presidente de la Comisión Verdad y Justicia, el obispo católico Mario Melanio Medina, dijo que los organismos de derechos humanos tendrían que "tomar los recaudos necesarios para que nada más llegar sea detenido".
Ligia Mora de Stroessner fue internada el martes en un sanatorio capitalino y ninguna fuente médica ni familiar ha dado detalles de su enfermedad, aunque medios locales afirman que ha sido por complicaciones cardíacas debidas a su avanzada edad.
El diario local 'Abc Color' afirmó hoy que el regreso de ambos estaría motivado por la enfermedad de la esposa del ex dictador, Ligia Mora, de 95 años, quien permanece desde hace tres días en la unidad de cuidados intensivos de un hospital asunceno.
"Si es que llegaran a venir a la República del Paraguay, vamos a proceder en consecuencia, lo cual significa que se procederá junto con la justicia a lo que las leyes exigen", afirmó Rachid a los periodistas.
La ministra aclaró que el Gobierno no ha recibido planteamiento alguno para que Stroessner y el hijo que le acompaña en Brasil puedan volver al país por razones humanitarias.
Según 'Abc Color', Stroessner "estaría tratando directamente con el Ejecutivo", mientras que el abogado de su hijo, Hirán Delgado, confirmó hoy que ha recurrido a la justicia para revocar la orden de detención que pesa contra su cliente.
Añade que el ex dictador y su hijo argumentaron una "acuciante situación familiar", aunque el activista de los derechos humanos Martín Almada aseguró que el hombre que manejó Paraguay con mano dura más de 34 años no puede hacer ese tipo de invocaciones.
"Stroessner nunca ha tenido consideración de la urgencia familiar con nadie. Fue implacable con todo, tiene que pagar, rendir cuentas ante la justicia paraguaya e internacional por el Operativo Cóndor", dijo Almada, quien en 1992 descubrió los archivos secretos de los organismos de seguridad de la dictadura.
Las toneladas de documentos secretos que había en los archivos desvelaron detalles del Operativo Cóndor, un esquema de intercambio de información y de prisioneros políticos durante los regímenes militares que imperaron en los países del Cono Sur americano en la década de los años 70 y comienzos de los 80.
Stroessner, de 93 años, "fue cómplice de la desaparición de más de 30.000 argentinos, responsable de la muerte de más de 120 paraguayos en Argentina y contribuyó a los golpes de Estado en Chile y Bolivia", señaló Almada.
El anciano ex dictador afronta varios procesos por delitos de lesa humanidad, entre ellos uno por la muerte de la esposa de Almada, Celestina Pérez, mientras el activista estaba preso, y otro por la desaparición de dos hermanos después de ser detenidos.
En esos casos fue declarado "reo rebelde y contumaz a los mandatos de la ley".
Por su parte, el presidente de la Comisión Verdad y Justicia, el obispo católico Mario Melanio Medina, dijo que los organismos de derechos humanos tendrían que "tomar los recaudos necesarios para que nada más llegar sea detenido".
Ligia Mora de Stroessner fue internada el martes en un sanatorio capitalino y ninguna fuente médica ni familiar ha dado detalles de su enfermedad, aunque medios locales afirman que ha sido por complicaciones cardíacas debidas a su avanzada edad.
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