El aguafiestas que disparó y ganó Hijo de un sastre judío. El dramaturgo británico no figuraba en ninguna lista de favoritos. Sus 29 obras parecen sumergidas en una atmósfera de amenaza y horror. Ya no escribe. Ahora dispara contra George W. Bush, Tony Blair y Pinochet. El año pasado recibió la medalla de honor Centenario Pablo Neruda. Hoy vive su propia lucha contra el maldito cáncer. Javier García La Nación* Ni el rechazo de Jean-Paul Sartre en 1964, ni la polémica sobre la ganadora del año pasado, Elfriede Jelinek, ni el retiro este año de un miembro de la Academia, impidieron que el premio más importante de las letras sobre la Tierra siga su curso. En estos últimos días Estocolmo fue la capital del misterio. Una casa de brujas, donde los personajes principales han sido los 18 miembros de la Academia Sueca, que decidieron entregar el Nobel de Literatura al dramaturgo (y poeta) británico Harold Pinter, de 75 años (el último británico premiado fue en 2001 V.S. Naipaul). Los favoritos
Hasta que brille la luz de un nuevo día