Ir al contenido principal

"Cierren Guantánamo y desvele lo demás"


«Cierre Guantánamo y desvele lo demás»
Irene Khan, Secretaria General de Amnistía Internacional*

Las observaciones que hace Amnistía Internacional en su último Informe Anual sobre las violaciones de derechos humanos cometidas por Estados Unidos han provocado una polémica ampliamente reflejada en los medios de comunicación, especialmente por el uso del término «gulag» para referirse a la situación de Guantánamo, y por la réplica del presidente estadounidense. Publicamos en las páginas siguientes un artículo elaborado con este motivo por la secretaria general de la organización, Irene Khan, así como otra opinión expresada por un funcionario retirado del servicio exterior de Estados Unidos.
La historia está llena de personas que permanecieron en silencio ante los abusos. Con ello, la única causa a la que contribuyeron fue permitir que se cometieran más abusos con impunidad. Amnistía Internacional no está dispuesta a engrosar sus filas.
Cuando publicamos nuestro Informe anual 2005, una evaluación anual de los abusos cometidos contra los derechos humanos en 149 países de todo el mundo, incluimos un capítulo sobre Estados Unidos y denunciamos, entre las críticas, las prácticas estadounidenses en la «guerra contra el terror», incluidas la detención indefinida sin cargos ni juicio y la tortura.
Esto desencadenó un ataque verbal sin precedentes de destacadas personalidades de la administración, incluidos el presidente Bush, el vicepresidente Dick Cheney, la secretaria de Estado Condoleezza Rice, el secretario de Defensa Donald Rumsfeld y el presidente del Estado Mayor Conjunto de las Fuerzas Armadas, general Richard Myers.
El lenguaje empleado en nuestro Informe anual 2005 era claro. No insinuábamos, como algunos han interpretado, que los gulags soviéticos y Guantánamo son abusos equivalentes. Nuestro argumento era que ambos son símbolos de los abusos contra los derechos humanos cometidos por superpotencias en sus respectivas épocas.
Vergüenza
Los malos tratos a que son sometidos los detenidos en Guantánamo son una vergüenza para los mejores valores estadounidenses, además de para las normas internacionales. Un centro de detención en el que los reclusos permanecen prácticamente incomunicados, sin cargos, juicio o acceso debe ser condenado por los ciudadanos estadounidenses y por todas las personas a quienes les importan la verdad, la justicia y la libertad.
Las acciones de Estados Unidos son también un regalo propagandístico para los grupos armados que cometen actos brutales de violencia, y una distracción de la necesidad de garantizar que estas personas comparecen adecuadamente ante la justicia.
Pero Guantánamo no es un caso único, sino la punta de un iceberg de abusos, el eslabón más conocido de una cadena de campos de detención que van desde la base aérea de Bagram, en Afganistán, hasta las prisiones de Irak y otros lugares.
Siguen filtrándose pruebas y denuncias de abusos, torturas y asesinatos de esta sombría red de centros de detención. Pero pese a la preocupación en Estados Unidos y otros países, la administración no ha realizado una investigación totalmente independiente.
Prohibición de la tortura
La realidad es que las políticas y prácticas estadounidenses de interrogatorio y detención en el contexto de la «guerra contra el terror» vienen infringiendo deliberada y sistemáticamente la prohibición absoluta de la tortura y los malos tratos consagrada en los tratados internacionales. Donald Rumsfeld aprobó personalmente un memorándum en diciembre de 2002 que permitía el uso de medios de interrogatorio ilegales, como técnicas de «estrés y padecimiento», el aislamiento prolongado, desnudar a la víctima y el uso de perros en la Bahía de Guantánamo.
Esta actitud displicente hacia principios de la justicia y la libertad acordados internacionalmente es ilegal y está causando un enorme daño al marco de los derechos humanos y a la autoridad moral de Estados Unidos como paladín de estos derechos. Además, transmite a los gobiernos represivos de todo el mundo el mensaje de que algunos abusos, como la tortura y los tratos crueles, inhumanos y degradantes, son aceptables.
Amnistía Internacional ha compilado cuidadosamente numerosos informes en los últimos años y publicado cientos de páginas de pruebas y denuncias de abusos graves contra los derechos humanos cometidos por agentes de Estados Unidos en la «guerra contra el terror». La administración estadounidense no ha respondido a ninguno de estos informes, en marcado contraste con su respuesta retórica y defensiva a la presentación de nuestro Informe anual 2005.
Ataque y defensa
Es evidente que la administración considera que ese ataque es la mejor defensa. Muy bien. Después de más de 40 años de denunciar abusos contra los derechos humanos dondequiera que se cometan, Amnistía Internacional se ha acostumbrado a recibir ataques de gobiernos de todo tipo y forma. Normalmente muestra que hemos dado en el blanco.
Lo que no está tan bien es que la administración no aborde el fondo y el detalle de los motivos de preocupación de Amnistía Internacional. No importa que Dick Cheney diga que no se toma en serio a Amnistía Internacional. Pero sí importa que tanto él como sus colegas se tomen en serio los derechos humanos.
El actual debate ofrece a la administración una oportunidad perfecta para demostrar que está dispuesta a cerrar la brecha que separa la retórica de la realidad y abordar los motivos de preocupación de fondo que Amnistía Internacional y otras organizaciones de derechos humanos han denunciado en reiteradas ocasiones en los últimos años.
Presidente Bush: el desafío es claro. Cierre el campo de detención de Guantánamo y acuse formalmente a los detenidos en aplicación de las leyes estadounidenses ante los tribunales estadounidenses o póngalos en libertad. Desvele el resto y respalde una investigación completa e independiente sobre las políticas y prácticas estadounidenses de detención e interrogatorio, incluidos la tortura y los malos tratos.
Reafirme los principios básicos de la justicia, la verdad y la libertad de los que tanto se enorgullecen los estadounidenses. Haga de Estados Unidos una auténtica fuerza para el bien en un mundo dividido y peligroso.
* Artículo publicado en 'La Revista' de Amnistía Internacional, Agosto-Septiembre 2005.

Comentarios

Entradas más populares de este blog

A UN AÑO DE LA MISTERIOSA DESAPARICIÓN DE FRANCISCO CATALÁN

Lunes 28 de noviembre de 2005 ¿Dónde estás, Francisco? Las hermanas Catalán Avello no bajan los brazos. A un año de la desaparición de su hermano menor, luego de involucrarse con una prostituta, aseguran que van a seguir buscando, golpeando puertas y protestando como lo han hecho frente a Investigaciones. Ahora quieren cita con Clara Szczaranski. José Miguel Jaque La Nación Margarita , Angélica y Fabiola dicen que en la velatón del sábado en la noche, una especie de alivio les recorrió el cuerpo. Por primera vez desde que iniciaron la incesante búsqueda de su hermano Francisco Catalán Avello , desaparecido hace un año, una pequeña multitud se hizo parte de su dolor y angustia. Las tres hermanas se sintieron acompañadas. Sólo bastó un abrazo silencioso y una vela encendida. “Se cumplió un año, pero para mí fue un día como cualquier otro, con la misma pena. Y sigo esperando que aparezca Francisco... como todos los días” , cuenta Fabiola la mañana del domingo, luego de una jornada que ...

La red de protección del tío Paul

Domingo 22 de enero de 2006 LOS REVELADORES CAPÍTULOS DEL LIBRO “LOS AMIGOS DEL ‘DR.’ SCHÄFER". Políticos, ministros, abogados, empresarios, doctores y hasta el cura Hasbún pasaron alguna vez por Villa Baviera, compartieron un banquete en Bulnes o escucharon embelesados el coro de niños. Una investigación, recién publicada por Editorial Debate, de los periodistas Claudio Salinas y Hans Stange revisa los profundos nexos entre civiles y miembros del Estado con Villa Baviera. “Todos tienen su precio”, solía decir el jerarca. Por Claudio Salinas y Hans Stange La ex ministra de Justicia Mónica Madariaga (en la foto de la izquierda, quien también es prima del dictador Pinochet ) fue una de las más fervientes admiradoras de Paul Schäfer y su 'obra' . Sus palabras son elocuentes: “Sin ser alto, era imponente, de muy buen físico. Pese a su defecto visual, era extremadamente buenmozo. Muy bien vestido, con una presencia cuyo halo invade. No pasa inadvertido. Él llena espacios” . La ...

HISTORIAS DE CHILENOS PERDIDOS EN EL ANONIMATO

Domingo 27 de noviembre de 2005 Desaparecer sin apellido Durante diez días, la búsqueda de Chago Errázuriz sacudió a la opinión pública. Sandra Tolosa hizo lo propio arrodillándose ante el general Cienfuegos para que hallara a su hijo José Miguel Carrasco. Pero hay cientos de chilenos que se pierden en silencio y engordan las cifras de la Policía de Investigaciones. Dolor, angustia y desolación es la realidad que puede caer sobre sus hombros un día cualquiera. Carla Alonso La Nación “La Pascua no es igual sin él. Cenamos y las lágrimas caen encima de los platos. En Año Nuevo, la gente sale a la calle, se saluda y nosotros nos quedamos encerrados. ¿Para qué vamos a fingir que tenemos felicidad si por dentro estamos destruidos?” , relata Luisa Ruiz (en la foto) con un dejo de amargura. Ella perdió a su hijo Jordan Fernández hace casi ocho años. El joven tenía 15 cuando desapareció en un liceo de La Unión, donde estaba interno. Su padre, Ruperto Fernández (en la foto, a la izquierda),...